La Peste Porcina Africana (PPA) es una enfermedad vírica (agente causal virus de la familia Asfarviridae) para la que no existe vacuna ni tratamiento eficaz, que afecta a cerdos y jabalíes, ocasionando importantes pérdidas económicas en las explotaciones porcinas. A continuación compartiremos cierta información que debes saber sobre la PPA y algunas de las claves para combatirla.
¿Cómo se transmite?
Las vías de transmisión de la PPA más importantes son:
Las vías de transmisión de la PPA más importantes son:
- Contacto directo (animal vivo) por la entrada de un jabalí o un cerdo infectado. Se podría transmitir por lechones, cerdas de reposición y cerdos para sacrificio sin presentar sintomatología clínica (animales que estén en el periodo de incubación de la enfermedad) pero que están excretando virus. En el caso del jabalí las vías de ingreso contemplan el movimiento natural de fauna silvestre o directamente mediante el ingreso de animales infectados que sean importados (jabalí doméstico importado de zonas positivas).
- Producto contaminado, productos cárnicos realizados con carne de animales infectados con PPA son susceptibles de transmitir la enfermedad a otros animales sanos.
- Material contaminado, fómites, dado que el virus tiene alta supervivencia en vectores mecánicos que han estado en contacto con el virus y no se han limpiado y desinfectado de manera correcta.
- Vectores biológicos, garrapatas de la familia Ornithodorus que contraen el virus al chupar sangre infectada (los jabalíes suelen ser reservorios del virus, portadores asintomáticos) y lo transmiten cuando pican a animales sanos. Además también se han descrito vectores que transmiten la enfermedad de forma meramente mecánica como es el caso de la mosca Stomoxys calcitrans se demostró la transmisión a animales susceptibles tras 24 horas, sin observarse disminución del título viral en 48 horas. Por lo que se asume que estas moscas serían capaces de transmitir el virus por transporte de sangre o fluidos contaminados en sus patas durante dos días.
¿Cuáles son los síntomas?
Los síntomas de la PPA pueden ser muy diversos, dependen de la fortaleza del virus, la vía de infección implicada y de la resistencia que oponga el animal infectado. Encontraremos distintas presentaciones de la enfermedad que pueden variar de casos subagudos, agudos y en algunas oportunidades crónicos (que actualmente no se presentan y fueron registrados en la península Ibérica entre los años 1950 y 1960). Los casos que se presentan con mayor frecuencia son subagudos y agudos. Algunos de los síntomas más comunes son los siguientes:
Los síntomas de la PPA pueden ser muy diversos, dependen de la fortaleza del virus, la vía de infección implicada y de la resistencia que oponga el animal infectado. Encontraremos distintas presentaciones de la enfermedad que pueden variar de casos subagudos, agudos y en algunas oportunidades crónicos (que actualmente no se presentan y fueron registrados en la península Ibérica entre los años 1950 y 1960). Los casos que se presentan con mayor frecuencia son subagudos y agudos. Algunos de los síntomas más comunes son los siguientes:
- Fiebre alta
- Lesiones hemorrágicas en la piel principalmente en orejas, abdomen y extremidades
- Postración, debilidad y dificultad para levantarse
- Vómitos y/o diarrea
- Conjuntivitis
- Tos y problemas para respirar (disnea), descarga nasal
- Patas, orejas, cola y hocico de color azul (cianosis)
El periodo de incubación comprende un rango de 4 a 19 días, en que los animales no presentan sintomatología clínica pero son capaces de transmitir la enfermedad mediante la excreción del virus. Esta enfermedad causa la muerte en un periodo de tiempo muy corto en casos subagudos en horas sin llegar a presentar sintomatología, para los casos agudos el tiempo puede variar entre los 6 y 15 días aproximadamente, llegando a alcanzar unas cifras de mortalidad cercanas al 100%.
Medidas de prevención y control
Al no existir ninguna vacuna eficaz es necesario extremar las medidas de bioseguridad y de vigilancia sanitaria, incrementando los controles en las importaciones de ganado y garantizando una adecuada eliminación de las bajas en las explotaciones.
Los aspectos a tener en cuenta en materia de prevención, en estos casos, son los que se mencionan a continuación:
- Mantener las puertas, ventanas y accesos restringidos cerrados para controlar la entrada de insectos, realizando correctos programas para control de insectos.
- Aislar las explotaciones mediante un vallado perimetral que permitirá protección exterior.
- Entrar con ropa y calzado limpios y desinfectados al lugar en el que se encuentren los animales, distinta de la usada en el exterior.
- Transportar a los animales manteniendo con rigor las medidas de bioseguridad pertinentes.
- Controlar los vehículos que acceden a la explotación los cuales deberán estar limpios y desinfectados.
- Realizar la gestión del estiércol y del purín en espacios habilitados, recogiéndolo en depósitos perfectamente cerrados.
Sin embargo, en aquellos lugares en los que se haya detectado el virus, el control de la enfermedad se basa en el sacrificio obligatorio de todos los cerdos afectados o susceptibles de serlo, así como la eliminación de todos los materiales con los que pudieran haber estado en contacto. Tras realizar estas acciones se deberá llevar a cabo una exhaustiva limpieza y desinfección de las instalaciones para posteriormente volver a adoptar las medidas de prevención que se mencionaron anteriormente.
Esperamos que este post os haya sido de utilidad.